Abandonar el presente…para convertirlo en futuro

A veces que hay que despedirse de algo para reencontrarse, desde otro prisma, desde otro color, desde otra posición… A veces el fango no te deja caminar, ni ver lo que puedes palpar, tocar, amasar… A veces nos faltan las fuerzas, otras tenemos demasiadas y nos ahogan…y si uno se queda inmóvil; se paraliza, se agrieta, se seca… El miedo nos agarra, nos sujeta, nos protege y a veces nos revienta sin poner acción. Pero si uno prueba a desatar el nudo e intenta caminar sin la soga…puede solo puede que se encuentre, y a la vez puede que se desencuentre. Esa es la única manera de seguir viviendo…los encuentros y desencuentros de tu propia piel…sin filtros ajenos, sin miradas caprichosas…sin jueces.